Gabinete en crisis: elogios desmedidos, ministros apuntados y cuentas pendientes | La preocupación de Milei por Pettovello, el halago a Caputo y el dardo a Posse

A seis meses de iniciar la gestión, el Gabinete de Javier Milei no encuentra calma. Si bien en Casa Rosada descartan nuevos cambios, hay más de un funcionario de primera línea en la mira. La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, concentra por estas horas toda la atención por los alimentos retenidos de los comedores populares, las denuncias de corrupción que la salpican y versiones que indican que pretende irse. La tensión es tal, que el Presidente tuvo que salir –una vez más– a respaldarla. Lo mismo hizo con el titular de la cartera económica, Luis Caputo, arrinconado por la escalada de los dólares paralelos. Para el despedido jefe de Gabinete, Nicolás Posse, también hubo un mensaje. “Es historia”, sintetizó Milei y evitó desmentir que los haya espiado.

La delicada situación de Pettovello preocupa y mucho al Presidente. Por eso, desde que regresó al país, exagera los elogios a quien define como su mejor amiga. Sabe que la ministra está en la cuerda floja, que la situación la excede en términos emocionales y de gestión, y no quiere que se caiga. El cálculo que hace es que su renuncia significaría un daño para todo el Gobierno y un triunfo de las organizaciones sociales y el kirchnerismo. De ahí que en privado le haya pedido encarecidamente que haga un esfuerzo para quedarse y en público se deshaga en halagos. “Es la mejor de la historia”, repitió ayer por la mañana, en un breve contacto que tuvo con los periodistas acreditados de la Casa Rosada.

Al ser consultado sobre las irregularidades que hubo en el acopio y entrega de alimentos y en los contratos del mega ministerio, el libertario manifestó: “Lo que no esté en orden… Vamos a ser implacables con la corrupción en todas las líneas”. Y remarcó: “Ningún alimento llegó tarde”.

El intercambio con la prensa fue unos minutos antes de la clásica conferencia de Manuel Adorni. Para esa hora, ya se anticipaba una jornada cambiaria complicada. Los dólares paralelos se vienen recalentando en los últimos días y ayer no fue la excepción. Ante el aumento de las divisas alternativas, la caída de los bonos y el aumento del riesgo país , Milei aseguró que “Toto” Caputo está “más firme que todo el edificio”, en referencia a la Casa Rosada. En un revoleo de datos, dijo que “es el mejor ministro de Economía de la historia”, porque logró bajar a 50 por ciento una inflación que “anualizada daba 17 mil”. “Es un montón y falta un montón, pero es un héroe nacional”, concluyó.

Quien no se llevó ningún elogio, más bien todo lo contrario, fue su examigo de la Corporación América, Nicolás Posse. Al ser consultado por su renuncia, el mandatario solo dijo “Posse es historia”. Incluso tuvo la oportunidad para desmentir que el exjefe de Gabinete haya utilizado a la AFI para espiarlos y no lo hizo. Evadió la pregunta y reiteró: “Posse es historia”. Por el contrario, calificó a su reemplazante, Guillermo Francos, como un funcionario “maravilloso”. “Si lo elegí yo es porque creo que es el mejor para el cargo”, resumió.

Un punto central de la reestructuración del Gabinete es que la AFI volverá a depender de Presidencia y saldrá de la órbita de la Jefatura de Gabinete. La idea es que Francos se desprenda de varias dependencias que dependen de su área y se concentre en ser un jefe de ministros coordinador de las distintas áreas.

A la espera de una definición está Federico Sturzenegger. Cerca de Milei explican que aún les queda una “charla pendiente” para terminar de cerrar los detalles de las funciones que tendrá a cargo el nuevo ministerio que conducirá. Según trascendió, el artífice de la ley Bases y el megaDNU estará al frente de una cartera de modernización del Estado similar a la de Andrés Ibarra durante el macrismo.

En la lista de funcionarios que está en la mira sobresalen dos: Mariano Cuneo Libarona y Diana Mondino. Al ministro de Justicia le reprochan no tener grandes éxitos de gestión para mostrar. La canciller, por su parte, quedó en el ojo de la tormenta por decir que “todos los chinos son iguales” y no la ven “alineada” con el proyecto político libertario.