“Homicidio culposo”, el descargo de los médicos sanjuaninos tras la condena por el caso Oriana Salinas

Este viernes se dio un fallo en el ámbito de la Justicia local que sentó en el banquillo de los acusados al médico pediatra Carlos Cabrera, quien fue condenado por homicidio culposo por la muerte de Oriana Salinas, una beba de un año y cinco meses que falleció en 2022 tras haber sido atendida y despachada a su casa. Conocido el fallo, algunos médicos sanjuaninos usaron sus cuentas personales en redes sociales para evidenciar su posición ante estos casos donde una falla humana termina condenando la profesión.

Entre los médicos que compartieron el descargo se encuentran la reconocida médica psiquiatra Laura Tamarit, y el doctor referente del Colegio Médico, Pablo Flores. En el texto, donde se comparte el caso judicial, se comparte el dolor tanto con la familia de Oriana, que perdió a la pequeña hace dos años, como también con la familia del profesional Cabrera, quien quedó no solo en la mira de la Justicia sino de los medios que se hicieron eco del caso.

En el texto, señalan: “Ninguno de nosotros Médicos (así en mayúsculas) que nos rompimos el culo estudiando, y formándonos después de recibir el título que nos habilita a ejercer la medicina queremos hacer daño. Es cierto que hay hijos de puta como en todas las profesiones, y perversos. Pero tampoco es por ahí hoy”.

Y continúa: “Hoy es por lo irracional de la situación de este médico, y tantos otros que han tenido que pasar por esa situación en la que se los acusa de Homicidio Culposo. Y muchas de esas personas se han alejado para siempre de la medicina para evitar esa angustia. Hayan sido declarados inocentes, absueltos o no”.

En torno a lo que expresa el escrito, un procedimiento judicial que investiga mala praxis lleva a que los médicos “tengamos menos ganas de atender”. “Que cada vez que abrimos la puerta del consultorio veamos en lugar de una persona a la que tenemos que ayudar a una posible amenaza”, señala contundente el texto.

Entre las líneas escritas se llega a leer la preocupación que comunican ante diversas situaciones donde entienden que como profesionales de la salud están vulnerables ante los pacientes cuando son grabados o cuando fallece alguien que están atendiendo.

“No es lo mismo atender a un paciente en un consultorio o en un quirófano y que las cosas no salgan bien que subirse borracho a un auto y matar a alguien. Y este juicio lo pone en el mismísimo lugar”, finaliza el posteo.