Tras los reiterados casos de maltrato animal en San Juan, presentarán un proyecto para agravar las penas
El caso de los asesinatos de “Topo” y “Negrita” y la brutal golpiza que sufrieron los dos perros akita en Chimbas conmocionaron a toda la sociedad sanjuanina. Es que, menos de diez días se hizo pública una de las mayores crueldades humanas, y esto no le fue indiferente a nadie: reacciones en las redes sociales, escraches y marchas públicas fueron unas de las pocas cosas que la gente hizo. Sin embargo, para los proteccionistas esto no es suficiente y creen necesario que haya penas más severas para quienes maltratan a los animales.
La proteccionista Emilia Merino contó a Tiempo de San Juan que, junto al abogado Adolfo López Martí, presentarán en febrero a la Cámara de Diputados de la provincia la modificación de la Ley Nº2005-L, popularmente conocida como Ley de Tenencia Responsable, que apunta a “crear un régimen de protección, bienestar y tenencia responsable de los animales de compañía”.
Esta legislación prevé, para las faltas graves, que pueden ser no cumplir con las obligaciones como dueño de animales o el extravío de animales, multas económicas que van desde los 200 a 1000 JUS. Para las faltas muy graves, que pueden ser desde el abandono o asesinato de los especímenes, se plantean multas de 1000 JUS a 6000 JUS o arresto de dos y hasta quince días.
El problema es que ninguna de estas penas supone prisión efectiva para los culpables del maltrato animal. “Necesitamos que las penas aumenten a tres años y 15 días para aquellos que maten o torturen a los animales, para que al menos vayan a prisión unos pocos días”, planteó Merino al respecto.
A nivel nacional, la Ley Nº 14.346 prevé penas solo de hasta un año de prisión para actos de crueldad que pueden ser la mutilación, vivisección, experimentar, abandono o asesinato. Esto significa que, teniendo en cuenta esta legislación, los culpables tampoco irían a prisión.
Cabe recordar que el artículo 26 del Código Penal establece que: “en los casos de primera condena a pena de prisión que no exceda de tres años, será facultad de los tribunales disponer en el mismo pronunciamiento que se deje en suspenso el cumplimiento de la pena”. Por lo que, la gran mayoría de las veces, los delitos de maltrato animal no significan prisión.
“El Estado se borra cuando se trata de estos casos. Muchas veces terminamos poniendo plata nosotros para hacerlos atender”, dijo la proteccionista.
Los casos resonantes
Los casos de maltrato animal mencionados anteriormente no solo llamaron la atención por la crueldad humana, sino también por haber sucedido con tan poco tiempo entre ambos. El primero El primero, protagonizado por Roberto Paredes el pasado 22 de diciembre, cuando mató a un perro con un cuchillo tras una pelea con su en un local comercial. Este hecho generó una fuerte reacción en la comunidad, que llevó a una marcha en la Plaza 25 de Mayo como muestra de repudio. El hombre fue detenido.
El segundo caso, relacionado con la muerte de una perra llamado “Negrita”, ocurrió en circunstancias aún no aclaradas completamente. La denuncia fue realizada el 31 de diciembre en la Comisaría 6ta, pero aún no se ha trasladado el caso a la UFI Genérica, por lo que no hay detenidos ni investigados. Según los informes, el agresor sería un verdulero que trabaja cerca de Boulevard Sarmiento y Lemos.
El tercero sucedió este jueves 2 de enero en Chimbas. Dos perros raza akita, madre e hijo, fueron sustraídos de su casa y golpeados salvajemente. Se cree que quisieron robarlos para venderlos, pero no pudieron y finalmente los abandonaron en un baldío.
En las últimas horas se sumó el brutal ataque a un perro, quien recibió dos impactos de un rifle de aire comprimido en Pocito. Proteccionistas solicitaron respaldo económico para cubrir los gastos del veterinario.
Leave a Comment