Vientos de Libertad, el espacio que nace para ponerle fin al flagelo del consumo problemático

Se entiende por consumo problemático todas las formas de consumo que afectan de manera negativa la salud tanto física y psíquica de la persona como también a su entorno. Este flagelo presente en la sociedad no es nuevo, y desde hace tiempo existen distintos espacios que se abocan al abordaje de personas que no pueden salir de las conductas dañinas. Vientos de Libertad es uno de ellos.

Natalia Moreno es referente del centro comunitario Vientos de Libertad, que pera tanto en Rivadavia como en Rawson. En diálogo con Tiempo de San Juan, explicó que la actividad principal del centro es el acompañamiento y atención de la persona con problemas de consumo, sea cual sea, siempre y cuando la persona lo reconozca como un problema y tenga voluntad de salir adelante.

“Dentro de esta problemática, abarcamos no solo los distintos tipos de consumo, sino también abordamos intentos de suicidios, casos depresión, personas con ataques de ansiedad, de pánico, y problemas de salud mental en general, como también violencia de género. En realidad, es algo que va todo de la mano”, asegura Natalia.

Para ello trabajan de manera conjunta con equipo de profesionales integrado por psicólogas como trabajadoras sexuales, además de acompañantes y voluntarios que, movilizados por la situación, se suman para ayudar.

Vientos de Libertad ofrece talleres recreativos y deportivos en los dos espacios donde funciona, lo que ayuda a que las personas con problemas o sus familiares se acerquen y encuentren un espacio de escucha y contención. “Por lo general los casos que tenemos se acerca la familia, es difícil que se acerquen por voluntad propia. Conociendo a la persona vemos el tipo de acompañamiento”, explica.

El acompañamiento que ofrece el centro de realiza de una manera integral sobre la persona. Si bien se tiene en cuenta el consumo, no se hace foco en ello, sino que se propone un abordaje integral, teniendo en cuenta no solo la sustancia consumida, sino la vida laboral o escolar, el entorno familiar y vincular.

“Dentro de nuestro espacio contamos con aproximadamente 53 personas que tiene problematizado el consumo. Las demás son personas que van a los talleres, pero no problematizan el consumo, es decir, que aún no lo acepten como un problema en su vida”, precisa la referente del Centro.

Falta de recursos, de espacios y de coordinación con otras áreas, los principales desafíos de Vientos de Libertad

Si bien el grupo es bastante activo, realiza diversas actividades con frecuencia e incluso forman parte del Consejo Provincial en Materia de Consumo Problemático, integrado por Casa Pueblo, Red Puentes y Ni un Pibe Menos por la Droga, Natalia sostiene que hoy en día mantener la actividad del centro es complejo por distintas adversidades, entre ellas, la falta de recursos.

“La falta de recursos es uno de los principales desafíos. Trabajamos bajo un convenio de Sedronar donde recibíamos recursos, pero desde los ajustes de diciembre nos quedamos por ejemplo sin el espacio en Rivadavia, donde alquilábamos una casa, y ahora nos prestan un par de horas en una unión vecinal. Eso implica un desarreglo en los procesos de las personas que vienen trabajando para salir adelante”, explica Natalia.

A eso se suma la necesidad de contar con una red donde no solo estén presentes los demás espacios que abordan la problemática, sino también el servicio de salud público o el sistema judicial, por ejemplo. Sobre ello, la referente del espacio comenta que en más de una oportunidad han tenido dificultades para conseguir turno con un médico o especialista en salud mental, e incluso inconvenientes a la hora de conseguir una cama para una desintoxicación de algunas de las personas que asisten y por distintos motivos tuvo una recaída.

Es por ello que desde el Consejo han elaborado un proyecto de ley para que se declare la emergencia para el abordaje de consumo problemático.

Si consideras que tienes problemas de consumo y necesitas ayuda, o algún miembro de la familia se encuentra en esa situación, Vientos de Libertad funciona en Rivadavia, puntalmente en la Plaza de la Villa San Roque, cerca de la FACSO; y en Rawson en la Unión Vecinal del Barrio Franklin Rawson.

Fabian