Votos y premios por plata: el trueque entre Milei y Jaldo

En el Sheraton, Javier Milei hizo gala de sus aires de grandeza al autodefinirse como el mejor presidente de la historia. Pero lejos de esos fuegos artificiales, el evento en la capital provincial le sirvió para afianzar su vínculo con Osvaldo Jaldo y Raúl Jalil. Mensaje de apoyo a los radicales con peluca echados por la UCR

El presidente Javier Milei recibió otro premio del cosmos de fundaciones liberales, esta vez en el Hotel Sheraton de Tucumán y con el título de “a la valiente defensa de la libertad”. El reconocimiento fue otorgado en la cena anual de la Fundación Federalismo y Libertad, presidida por el abogado y lobbista José Guillermo Godoy. Milei subió al escenario y agradeció, en especial, a los gobernadores de Tucumán y Catamarca, que aportaron votos claves en el Congreso en la sanción de la Ley Bases. El agradecimiento presidencial también llegó vía aportes del Tesoro: las dos provincias son las que más plata que reciben del Ejecutivo nacional.

La fundación se presenta como un “think tank” de las ideas liberales con expansión de sus servicios en toda América Latina y Estados Unidos, donde radicó la “Liberty + Foundation”; además de integrar la Red Liberal de América Latina que reúne a otras organizaciones liberales latinoamericanas, y mantener lazos de cooperación con la Fundación Friedrich Naumann (Alemania). Antes que Milei, el galardón había sido otorgado a los ex presidente uruguayos Julio María Sanguinetti y Luis Alberto Lacalle Herrera; padre de Luis Lacalle Pou, mandatario saliente de Uruguay.

A mediados de año, cuando Milei viajó a Tucumán para firmar el demorado “Pacto de Mayo”, la fundación que lo premió esta noche realizó la presentación de su “plan de reforma provincial”, que incluía una reforma política y una tributaria con el objetivo de avanzar sobre “los mecanismos estatales que obstaculizan el desarrollo productivo de la provincia, tales como impuestos confiscatorios, impuestos con baja recaudación y organismos burocráticos de eficiencia limitada o nula“.

En la gala liberal estuvieron presentes la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; la vicepresidenta del Senado, Carolina Losada (Santa Fe); el senador y titular del bloque de LLA, Ezequiel Atauche, varios diputados oficialistas, y el intelectual de ultraderecha Agustín Laje, presidente de la Fundación Faro. Milei, por su parte, le agradeció el apoyo del PRO y de los radicales con peluca, acaso pensando en reforzar su veto presidencial.

Pero la presencia estelar fue la de un peronista aliado, el gobernador Osvaldo Jaldo; quien en la previa del arribo de Milei aseguró que “la provincia está a disposición para acompañar al presidente”. Jaldo se alió rápidamente a la Casa Rosada en busca de fondos frescos para su provincia; tras la decisión del Gobierno de marcar parte del ajuste fiscal con el recorte de las transferencias a las provincias. En el tren de aliados peronistas también se esperaba la presencia del gobernador Raúl Jalil (Catamarca). Jalil, en tanto, no le falló al presidente y dijo presente para cenar el Sheraton.

Como reveló PáginaI12, a fuerza de apoyar la Ley de Bases y jugar a favor del oficialismo en los vetos contra el financiamiento universitario y el aumento a los jubilados, Jaldo y Jalil consiguieron anotarse entre las provincias beneficiadas por los giros de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN).

En noviembre pasado, el Estado nacional utilizó 20.500 millones de pesos solo para realizar giros a cinco provincias. La provincia de Jaldo fue la segunda más beneficiada con 4500 millones; detrás de Salta que fue la que más fondos recibió (6000 millones). La Catamarca de Jalil consiguió el favor de 3000 millones al igual que Jujuy; mientras que Misiones recibió 4000 millones.